"CEDA EL PASO"

Te voy a contar lo que siento cuando no me ceden el paso.

Te voy a contar el torrente de ira y sentimientos amargos que me corre por las venas cuando un montón de estúpidos desconsiderados circulan en su propio mundo SIN TENER UN MÍSERO de solidaridad para conmigo, ahí frenadita esperando que el apocalipsis llegue y yo pueda ingresar o cruzar una avenida.

Te voy a contar que esas mil millones de horas que pasan mientras espero que los autos y la remil concha de la lora frenen, siento ganas de abrir la puerta, pararme arriba del capó de MI auto y hacerle a los conductores milquinientas ochocientas mil señas obscenas, que los manden a la remil puta que los parió, que les recuerden a la perra de su madre y lo abierto que tienen algunos sectores (ya se, me zarpé, pero este es un espacio CATÁRTICO y SIN FILTRO, no lo olviden).

De repente siento que la bocina de un tren no me alcanzaría para hundirle los tímpanos como quisiera en ese momento, que quisiera que las luces de mi auto sean una especie de sirena de LED de la CAP para que cuando les haga seña de luces queden bajo un efecto shock psicodélico y terminen estampados contra algún cantero.

Tengo ganas de bajarme de mi auto y tirarme abajo del de ellos, para que por ir tan rápido y atorados no lleguen a frenar y yo me muera atropellada por SU CULPA y ellos no puedan vivir NUNCA MÁS en paz. Después cambio de idea y la ira da lugar a la bronca entonces tengo ganas de pararme en el medio de la calle a llorar desconsoladamente del EMBOLE que me genera ese momento de NADA en el que el tránsito de la ciudad de hunde, un NO momento que no sirve para una reverenda mierda, sino para subir los índices de mal humor a las nubes.

Después un buen cristiano me cede el paso y me caigo de orto del shock emocional y de tanto que no lo puedo creer el tipo se hartó de esperar y volvió a arrancar diciendo "bué, anda a cagar mocosa" y yo me quiero cortar las venas con un caryón.

Y cuando llega el segundo ser solidario paso radiante de la felicidad, y tengo ganas de bajarme del auto y abrazarlo y chaparmelo de lo ENCANTADOR que me resultó su gesto.

CEDAN EL PASO MIERDA.